Silenciamos nuestro interior
y nuestro corazón empieza a experimentar latidos diferentes...
Entonces nuestro exterior
experimenta esa paz que creimos lejana...
No hay que correr,
la vida en estos casos nos da la posibilidad
de para y probar de esa sensibilidad que todavía,
muy en el fondo tenemos...
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Para @SBurckhard
Un poema bastante sensitivo...
ResponderEliminarUn gusto haberlo leído.
Gracias Sergio por tu mensaje, espero que puedas seguir leyendo todos los días lo que escribo...
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