No era la forma, no era el motivo, la revelación más grande que se puede experimentar es esa, la de debatirse entre esa cadena idónea donde todos te quieren meter, y la pelea tiene que darse en no dejarse, en limitarse a ser un observador, y a veces callar, pero nadie tiene la potestad de decidir sobre ti, sobre lo que es mejor hacer, o si debes ir por un camino u otro, me revelo contra ese encarcelamiento, contra esa potestad que no logra ni tocarme, contra esa locura que todos ven como normal, si mi corazón tuviera que vivir todo el tiempo en mi cuerpo, seguramente ya abría estallado, porque a veces el quiere a su manera, de la forma mas inimaginable, a veces se sale del cuerpo para demostrar lo que no es contrario, para asumir la condición de seguir siendo parte de mi...
Ref. Debates internos
